Santiago de Compostela despidió este lunes a las víctimas del accidente de tren en un emotivo funeral oficial presidido por los príncipes de Asturias y celebrado en la catedral de la capital gallega, marcada por el dolor desde el pasado miércoles por el peor siniestro ferroviario de la historia de España desde 1944. Centenares de gallegos siguieron la ceremonia desde dentro del templo y en las plazas aledañas, según rtve.es.
El arzobispo de Santiago de Compostela, Julián Barrio, se dirigió a las familias de los 79 fallecidos y del más del centenar de heridos para recordarles que no están solas y que Galicia y España les han "llevado en su corazón" desde la tarde del pasado 24 de julio, cuando descarriló el Alvia que cubría la ruta Madrid-Ferrol.
Barrio pidió al apóstol Santiago que les ayude a "renovar su esperanza" en Jesucristo para encontrar consuelo y "dar sentido a sus vidas y sus muertes".
El arzobispo reconoció durante la homilía que "no es fácil comprender y aceptar" la pérdida de un ser querido, pero les ha pidió que "no malgasten" el dolor porque "todo tiene sentido".
"El sufrimiento y la muerte parecen contradecir la buena nueva del amor de Dios y hacen estremecer nuestra fe, pero la fe nos dice que nuestro dolor y sufrimiento unido al de Cristo en la Cruz es portador de salvación, por eso toda tristeza por la muerte de un ser querido es sagrada", indicó el monseñor Barrio.
El arzobispo pidió al apóstol Santiago y a la Virgen María que "hayan peregrinado con ellos hasta el Pórtico de la Gloria celestial. Nada podrá arrancarnos el amor de Dios, nuestra paz y fortaleza".
Barrio ha abierto su homilía con el recuerdo "orante" para los heridos que siguen en los hospitales y les ha deseado una pronta recuperación. El número de heridos ingresados ha bajó este lunes a 69 al ser dado de alta uno de ellos. Aún hay 22 que permanecen en estado crítico, dos de ellos son niños que se encuentran en la UCI pediátrica.
El arzobispo de Santiago recordó también a todas aquellas personas que se "desvivieron" para atender a las víctimas desde un primer momento y el "esforzado" trabajo de los que colaboraron para paliar el "inmenso dolor" que siguió a la tragedia. Según Barrio, fueron "signos de luz en el misterio de la muerte y el dolor".
Los vecinos de Angrois recibieron este lunes la medalla de oro del Ayuntamiento de Santiago por su "actuación ejemplar".
Los príncipes consuelan a los familiares de víctimas
Tras la ceremonia, los príncipes de Asturias y la infanta Elena, que también acudieron a Santiago de Compostela, consolaron a las familias de las víctimas del accidente de tren que han acudido a la catedral.
Además de estos tres miembros de la Casa Real,acudieron al funeral oficial los presidentes de España, Mariano Rajoy, y de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, los ministros Ana Pastor, Alberto Ruiz Gallardón y Jorge Fernández Díaz.
También estuvieron presentes los presidentes del Congreso y el Senado, Jesús Posada y Pío García-Escudero, respectivamente, y los presidentes del Tribunal Supremo, Gonzalo Moliner, y del Constitucional, Francisco Pérez de los Cobos.
De acuerdo con lo que informa Efe, las campanas de la catedral empezaron tocar a muertos desde la seis de la tarde, una hora antes del comienzo del funeral oficial, y acompañaron la entrada de cientos de personas a la catedral en una cola que se formó sobre las cinco y media de la tarde y que discurría desde la plaza del Obradoiro a la de Platerías
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